Un servicio de administración de edificios generalmente se encarga de la gestión y mantenimiento de propiedades residenciales o comerciales. Los servicios pueden variar dependiendo de las necesidades específicas del edificio y de los acuerdos con los propietarios. Algunos aspectos clave que suelen incluirse son:

1. **Mantenimiento y Reparaciones**: Supervisión y coordinación de trabajos de mantenimiento preventivo y correctivo para asegurar que todas las instalaciones y equipos estén en buen estado.

2. **Servicios de Limpieza**: Organización de la limpieza de áreas comunes, como pasillos, vestíbulos, y otras zonas compartidas.

3. **Gestión Financiera**: Manejo de las finanzas del edificio, que incluye la elaboración de presupuestos, recaudación de cuotas de los residentes, y pago de facturas.

4. **Atención al Cliente**: Resolución de problemas y quejas de los residentes o inquilinos, y mantenimiento de una buena comunicación entre todos los involucrados.

5. **Contratos y Proveedores**: Selección y gestión de proveedores de servicios, como jardinería, seguridad, y otros contratos necesarios para el funcionamiento del edificio.

6. **Cumplimiento Normativo**: Asegurarse de que el edificio cumpla con todas las regulaciones locales y normativas de seguridad.

7. **Asamblea de Propietarios**: Organización y gestión de reuniones de propietarios, así como la implementación de decisiones tomadas en estas reuniones.

8. **Seguridad**: Implementación y supervisión de medidas de seguridad para proteger el edificio y sus ocupantes.

9. **Gestión de Inquilinos**: En edificios de alquiler, la administración puede encargarse de la selección de inquilinos, contratos de arrendamiento y resolución de conflictos entre inquilinos.

Estos servicios pueden ser proporcionados por empresas especializadas en administración de propiedades o por administradores independientes. ¿Hay algún aspecto específico de la administración de edificios que te interese?